PRIMERO YO...

Una de las máximas de mi papá era ese refrán o dicho, de que: Primero YO, después YO, y al último YO, cuando era mas pequeña y después de una rigurosa educación religiosa eso me parecía demasiado egoísta, hasta grosero, porque ¿no se supone, que éramos todos hermanos? ¿Que teníamos que ponernos en el lugar del otro?. Me confundía pensando que mi papá seguramente nunca había comprendido eso del amor al próximo, eso de "Dar hasta que duela". Así fueron pasando los años, crecí, me case, mi papá murió y esa frase se quedo en mi mente un poco como sinónimo de ser egoísta.

El año pasado que mi hija asistió a una conferencia,  cuando le pregunté como le había ido, me dijo encantada que habían empezado con una frase que ella no había oído, por supuesto, era nuestra frase de "Primero yo..." y cuando le comenté que a mi esa frase se me hacía muy egoísta y que su abuelo la decía, ella simplemente me dijo: como puedes querer a alguien, si no te quieres tú, cómo puedes querer cambiar el mundo, si no cambias tú, el mismo Jesús dijo; "Amarás a tu prójimo como a ti mismo". Así que si tu no te amas primero, antes de pretender amar a otros, realmente lo estás haciendo mal...

Y entonces lo comprendí, resulta tan obvio, tan claro, no puedes amar a otros si primero tu no te valoras a ti  mismo(a), es muy obvio el asunto, pero con el tiempo y una vez razonado, me he dado cuenta de que muchas de las personas que conozco no se aman, así que son capaces de soportar los peores tratos, soportar las peores situaciones, y encima decir que lo "hacen por amor", y NO!!!  soportar situaciones de violencia, dejarse humillar, eso es todo lo contrario del amor, el amor es paciente bondadoso, todo lo puede, pero debe empezarse por uno mismo, por el corazón de cada uno, si nuestros corazones están llenos de amor, solo darán eso, pero si no es así, se entregarán a quien no lo merezca, y eso a nadie puede hacer feliz, eso crea resentimientos, eso nos amarga el alma, eso nos hace hacerle lo mismo a los demás. incluyendo a las personas que amamos.

Así que, seamos egoístas, amemonos primero nosotros, así como somos, con nuestros defectos, con nuestras virtudes, amemonos, y entonces encontraremos a quien nos valore, nos cuide, y nos ame tal cual somos, y al que amemos tal cual es...

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