Jueves santo, prometí llevar a mi hija a la visita de los siete altares, el año pasado no se bien porque razón no celebramos ese jueves santo, así que en la mañana a despertarse temprano y antes de que la flojera, el aire, el frío o el sol nos convencieran que lo mejor era quedarse en casa, empezamos a recorrer templos y calles, algunos ya llenos de gente haciendo lo propio, y en las plazas los puestos a penas empezando a cocinar los platillos típicos, y los dulces llenos de abejas empezando el festín de cada año…
Una iglesia aquí otra allá y caminar, con misa en catedral reporteros esperando al Arzobispo seguro para preguntarle a cerca de alguna declaración controvertida de algún aspirante a Gobernador o presidente Municipal, en éstas épocas de elecciones “intermedias”, y los turistas sacando fotos de todas las iglesias y oyendo sin ganas la misa que parecía dada con el magnetófono mas poderoso…
Y llegábamos a una iglesia, y a otra, y rezábamos y seguíamos las palabras y oraciones de una folleto de la visita de los siete altares del 2005 que nos vendieron por un peso, en alguna de las iglesias y que esperamos no importe que no sea versión 2009…
Y al final nuestras creencias religiosas quedaron satisfechas y no nos dejamos tentar por los antojos, ni por las máscaras ni por los Power Rangers que vendían en todos lados, pero luego al ver la televisión y querer criticar como siempre a los personajes tan chistosos que luego aparecen en concursos verdaderamente extraños, mi hija que luego se cuestiona a cerca de nuestras creencias, me dijo con su ecléctica sabiduría, “mamá como es posible, si acabamos de regresar de la iglesia, si acabamos de rezar, si queremos creer y ser buenos, y ya vas a empezar a criticar a la gente “…
Vaya que difícil es se bueno… o no ¿?
Mas que amor
Publicado por: Gajojurega 19 de diciembre de 2006
No hay comentarios:
Publicar un comentario